1. Limpia los filtros internos.
El filtro es el encargado en recibir las particulas de polvo y a su vez evitar que llegue a las estancias del hogar. Es importante mantener los filtros limpios, para que no pierdan su función de atraer los acaros y el polvo. De hecho el rendimiento del aure acondicionado puede bajar debido al deterioro de los filtros. Por lo tanto, es pieza clave mantener los filtros limpios para una mayor eficiencia. No es necesario ningún producto específico de limpieza para limpiar los filtros, con lavarlos con agua tibia sería suficiente. Despues de limpiar los filtros, es recomendable dejarlos secar al aire.Es recomendable limpiar los filtros una o dos veces al año.
2. Limpiar la unidad exterior.
Hay que limpiar la zona donde se encuentra el gas refrigerante del aire acondicionado. Lo mejor es que lo realice un profesional, dado que son zonas donde se puede deteriorar facilmente la spiezas que lo componen.
3. Limpiar el Split interior.
Revisa las rejillas y limpialo con agua y jabon. Después de limpiarlo hay que secarlo con un paño limpio.
4. Vigilar las fugas.
Para que el gás no tenga fugas, es necesario revisar el circuito interior. en caso de que encontremos una fuga, es mejor llamar a un técnico profesional para que analice la estructura y consiga arreglar la fuga.
Si limpiamos de una manera eficaz el aire acondicionado, conseguiremos eficiencian y un menor consumo de energia. El aire que expulsara el aire acondicionado será más puro y evitaremos bacterias y particulas indeseadas. Gastaremos menos en la factura de la luz debido a la amortización energética. Otro punto a favor es que evitaremos futuras averias y conseguiremos que alargar la vida útil del aparato.
