En verano los sistemas de ventilación permanecen encendidos un gran número de horas. Y esto repercute tanto en la factura eléctrica como en la salud, si no se toman las medidas oportunas.
Como de lo que se trata es de disfrutar de las ventajas del aire acondicionado sin los inconvenientes asociados, vamos a darte algunos consejos para usar los sistemas de ventilación en verano de la manera más inteligente:
1) Utiliza el aire solo en las estancias en las que te encuentres
Muchas veces ponemos el aire en toda la casa cuando realmente no es necesario. Si vas a estar moviéndote de un lado a otro puede ser una opción, porque además evitarás los cambios de temperatura que provocan la mayoría de resfriados, pero si tienes pensado permanecer en una estancia un largo tiempo ( en el salón viendo una película o por la noche en tu habitación), recuerda apagar los equipos del resto de la casa. Tu economía lo agradecerá.
2) Mantén los equipos en buen estado
El mantenimiento es algo que se suele pasar por alto, cuando tiene una gran importancia. Un aire acondicionado con los filtros sucios o con algún tipo de obstrucción gasta más y además no proporciona la calidad del aire adecuada. Limpiar los filtros con agua y jabón, eliminar el polvo y revisar posibles obstrucciones son acciones necesarias para controlar el consumo y respirar un aire sano.
3) Conoce los distintos modos de tu equipo y utilízalos correctamente
Los fabricantes de equipos de climatización afinan cada vez más. Son conscientes de que un uso indiscriminado del aire puede conducir a problemas, y por ello construyen sus equipos con funciones específicas para determinadas situaciones. El modo nocturno, el modo swing o el apagado automático son funciones ideadas para que el consumo y la salud no se vean afectados.